La Raza del Poderoso y Cómodo Bulldog

La raza del antiguo y original Bulldog era muy peleador, valiente y tenaz. Eran utilizados originalmente para pelear con toros, posteriormente con osos y otros perros. Sin embargo, a mediados de la década de 1800, los deportes de sangre fueron declarados ilegales en Inglaterra, junto a las razas de pelea, entre ellos el Bulldog, enfrentando de este modo la extinción a menos que pudieran cambiar.

Afortunadamanete los Bulldogs pudieron hacerlo.

Características del Bulldog.

El Bulldog (o Bulldog Inglés) es un perro de tamaño mediano, con un cuerpo pesado y la cabeza grande, junto a unas piernas robustas, de pie puede llegar a medir entre 30cm a 40cm de altura y llegar a pesar entre 18kg y 22kg. El pecho es amplio y profundo, con las patas delanteras bien separadas. El hocico es muy corto, los ojos son redondos y los oídos están en lo alto de la cabeza. La cola es recta o atornillada. El pelaje es corto y fino y puede ser de varios colores, aunque muchos los prefieren en atigrado rojo.

Cuidados del Bulldog.

El pelo debe ser cepillado un par de veces a la semana con un cepillo de cerdas suaves. Las arrugas de la cara deben ser limpiadas diariamente para evitar la acumulación de suciedad y problemas de la piel. Algunos rostros de los perros pueden necesitar ser lavado después de cada comida.

El Bulldog no es un perro de agilidad, sin embargo puede disfrutar de un paseo diario, además necesitará un poco de tiempo para jugar cada día, ya que la obesidad puede ser un problema en la raza, pero también es un gran amante de la comodidad, por lo que los cojines del sofá le llamará la atención.

La formación temprana es importante, ya que los Bulldogs pueden ser bastante poderosos cuando son adultos. Pero la raza tiene un temperamento apacible y estable y con entrenamiento, estos perros rara vez tratan de meterse en problemas, aunque los cachorros pueden ser traviesos.

Advertencias del Bulldog.

Vivir con Bulldogs puede ser un desafío. Ellos roncan y se quejan, dejan caer la baba y la mayoría tienen problemas con la flatulencia.

Son cariñosos con los niños y suelen ser muy buenos con otros animales domésticos. Pero muchas veces algunos machos pueden desafiar a otros machos.

Ellos no respiran bien en climas cálidos y húmedos, por lo que son propensos a muchos problemas de salud, incluyendo alergias, dificultades respiratorias y problemas reproductivos.